12 - Sensible

El aire sopla con la fuerza de un caballo y los días se cuentan en reversa.

Dentro del todo hay un poco que se enreda en las expectativas del hombre libre

Y se encuentra cara a cara con el monstruo de una llama,

Maniaco, eso es. Con el corazón en mano y las ansias revueltas en la diestra,

Con la mirada de un loco anonadado y un hablar de cadencia traba.

Un revólver de palabras con la mira rota, con el gatillo bien puesto.

Los restos de cuchara, las notas perdidas, los inquietantes hertz de los caminos;

Un colectivo de imaginaciones populares hechas calle, y exquisitas.

Una carta de presentación al mundo vasto del jóven anarquista, sus ideas heroicas.

Con Gogh en el bolsillo y Baudelaire bajo el sombrero.

Abrazando con todos sus pianos a la gente en las aceras.